Dado lo deficiente del servicio de transporte público de pasajeros en la capital jujeña, que no pudo ser resuelto por la municipalidad durante los últimos 16 años, nuevamente cobra fuerza el planteo de numerosos sectores de que se habiliten nuevas alternativas para el transporte de la población. En dicho contexto, surge la opción de los servicios vía plataformas digitales, como UBER, que fue plasmada en un proyecto presentado en el Concejo deliberante capitalino por referentes de la Coalición Cívica.
La idea de habilitar un nuevo servicio, diferenciado del transporte alternativo, que tuvo fuertes aumentos en sus tarifas a instancia de la municipalidad, cosecha adhesiones y rechazos. Prueba de ello fue el pronunciamiento de un sector de propietarios de unidades del servicio de radio llamada que el pasado miércoles realizó un corte de calles en el casco céntrico rechazando la habilitación de los servicios vía plataformas digitales. Posteriormente, otro sector de trabajadores del volante, críticos a la gestión municipal, se expresaron en favor de la inclusión de nuevas alternativas en el sistema de transporte.
Atento al debate planteado, y la crisis que afecta al sistema de transporte, el presidente de la Coalición Cívica ARI de Jujuy, José María Albizo Cazón, fundamentó la iniciativa presentada en el deliberante capitalino, y que es denominada “Marco Regulatorio del Servicio de Transporte de Pasajeros Mediante Plataformas Electrónicas”. Mencionó que, mediante el proyecto, “simplemente se busca legalizar UBER, CABIFY y DIDI, entre otras plataformas, y no obstante ello refiere a la construcción de un marco que regule y que genere óptimas condiciones de competencia en el sector del transporte”.
A pesar del rechazo expresado por un sector de taxistas, que llamativamente se pronunció en favor de la “tasa” municipal sobre la venta de combustibles, el dirigente aseguró que más de 200 choferes del transporte alternativo están a favor de la instalación de nuevas opciones para el transporte alternativo que podrían conllevar beneficios no solo a los choferes sino también a los usuarios que en los últimos meses vienen padeciendo fuertes subas de tarifas.
Con relación a quienes se oponen a las nuevas opciones de transporte, afirmó que estos buscan “proteger lo que ellos no desean perder y que se traduce en la explotación de choferes que buscan ganar más, y que no pudieron acceder a la titularidad de una unidad”.
No dejó de alertar que en la ciudad hay licenciatarios que poseen más de dos o tres licencias de taxi y que en diversas ocasionen estas son comercializadas por sumas millonarias lo que afecta sensiblemente a los choferes, o peones, que no logran acceder a un permiso para prestar servicios. Al mismo tiempo, expuso que hay propietarios de unidades que llegan a cobrar importantes sumas por el alquiler de los vehículos. En este punto cabe mencionar que los ajustes de tarifas, autorizados por la comuna capitalina, parten por lo general de los incrementos en los precios de los combustibles.
En suma, al aumentar los combustibles la municipalidad dispone incrementos de tarifas lo que conlleva una caída en la demanda de parte de los usuarios. A pesar de esto último los titulares de licencias y vehículos incrementan a su el valor de los alquileres diarios de las unidades, con lo cual los mayores perjudicados son tanto los usuarios, como los peones de taxi.
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