En Jujuy el Presidente Alberto Fernández insistió que contra Milagro Sala hay una “Persecución Política”
En la víspera, y casi de manera sorpresiva, el presidente argentino, Alberto Fernández, llegó a la provincia para visitar a la referente de la organización Tupac Amaru, Milagro Sala, quien se encuentra internada en un sanatorio privado por una “trombosis venoso profunda”. Ante un selecto grupo de trabajadores de prensa, el primer mandatario nacional insistió en que la dirigente social, procesada y condenada por diferentes delitos, es víctima de una “persecución política” y cuestionó al poder judicial de la provincia.
La visita del presidente a tierras jujeñas trascendió en las primeras horas del miércoles y rápidamente concitó la atención de medios locales y nacionales quienes desde media mañana se apostaron en los alrededores de un conocido sanatorio de avenida Hipólito Irigoyen donde permanece internada la referente Tupaquera, Milagro Sala. El arribo de Fernández a la provincia se registró alrededor de las 11 horas. Inmediatamente, y bajo un estricto operativo de seguridad, se trasladó desde Perico hasta la capital provincial.
Minutos antes del mediodía, finalmente pudo ingresar junto a algunos de sus funcionarios a la sala donde permanece internada la dirigente. Durante el encuentro, que duro unos minutos, Fernández, le expresó su solidaridad y apoyo. Posteriormente se predispuso a un contacto con algunos medios de prensa, varios de ellos afines a la actual gestión de gobierno. Esto último género el repudio generalizado de los cronistas y reporteros de la provincia que esperaban mantener un contacto con la principal figura política del país.
Cabe reseñar que en los alrededores del edificio también se observó la presencia de militantes de organizaciones y manifestantes de sectores sindicales quienes llegaron hasta el lugar para intentar transmitirle al presidente sus inquietudes y malestar por las numerosas problemáticas que se registran en la provincia y que no son atendidas por el gobierno local.
Ante los trabajadores de prensa elegidos para la ocasión, el presidente sostuvo, “el motivo de mi visita a Jujuy es por la preocupación que tengo por Milagro (Sala); lo he planteado una y mil veces desde que empezó este ciclo, y no es algo nuevo».
A continuación, al aludir al estado de la dirigente tupaquera, mencionó, “noté que, como cualquier ser humano, en Milagro hay un deterioro después de siete años sin poder salir de su casa, también hay un deterioro mental, tanto de ella como en su marido; el deterioro lo tenemos a la vista».
Preso de su desconocimiento de la historia y realidad provincial, el mandatario argentino, insistió en que, “se ha planteado una y mil veces que lo que hemos denunciado es una persecución a Milagro Sala”, tras lo cual sostuvo que “siguen apareciendo causas e inventando en su contra”. Milagro Sala, dijo, «soportó alrededor de seis juicios orales, tiene elevación a otros juicios, como también otras causas (…) «todo esto demuestra un sistema contra Milagro Sala”.
Tampoco dejó de lado cuestionamientos hacia el poder judicial provincial al señalar que “estamos en un estado de derecho y la justicia debe actuar de otro modo; les pido a los jueces de Jujuy que dejen de lado terapias que contradicen el estado de derecho”. “Le pido también a la Corte Suprema de Justicia que tiene hace dos años la causa de Milagro Sala para que se aboque porque lleva 7 años en detención”, expresó Fernández, quien rápidamente fue blanco de numerosas críticas de parte de distintos sectores sociales y políticos que demandan políticas concretas, sin partidismos ni personalismos, para resolver la actual crisis económica y social de los argentinos.
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