En la víspera culminó el paro nacional universitario de 48 horas convocado por diferentes agrupaciones de trabajadores docentes y no docentes de las altas casas de estudio en rechazo a las políticas de ajuste del gobierno nacional. Dado el acatamiento, y el creciente malestar de los trabajadores de dicho sector, referentes la CONADU Histórica se pronunciaron en favor de un plan de lucha que se sostenga en el tiempo, todo con el objetivo de llamar la atención de las autoridades nacionales y así lograr verdaderas recomposiciones salariales.
En dicho marco, Antonio Rosello, miembro paritario de la CONADU Histórica, y candidato a secretario general de la lista Multicolor, llegó a la provincia para acompañar el reclamo de los universitarios. En diálogo con la prensa local describió la compleja realidad de los trabajadores de las universidades cuyos salarios, según afirmó, están por debajo de la línea de pobreza.
En torno a la adhesión de los trabajadores universitarios de todo el país, comentó, “esta es la expresión de bronca de los docentes y no docentes de la Argentina”. Al mismo tiempo precisó que durante la primera jornada de protesta, “el 95% de los trabajadores universitarios adhirieron al paro y de los 1.100 edificios de las 62 universidades nacionales, 1.000 estuvieron cerrados”.
A partir de ello, remarcó que, “el paro es la expresión de la miseria salarial, e incluso el Consejo de rectores dice que el 70% de la docencia universitaria gana por debajo de la línea de pobreza mientras que el 60% de los no docentes están en la misma situación”.
“Estos no son datos que damos nosotros desde el sindicato, sino que son datos que brinda la misma patronal”, acotó. Al ampliar conceptos sobre la realidad de las universidades, precisó que desde el Indec se informó que, “46,8% de los estudiantes provienen de hogares que están por debajo de la línea de pobreza, entonces hablamos de universidades de pobres para pobres y esto es lo que busca el gobierno”.
Al fundamentar los motivos del paro nacional, dijo, “queremos el 35% de aumento para ganar lo mismo que ganábamos en noviembre de 2023 con lo cual no estamos hablando de algo que pasó el siglo pasado”.
Gran parte de los reclamos de los universitarios obedecen a los bajos niveles de recomposición salarial y la ausencia de mesas paritarias. Atento a ello, mencionó que, desde la agrupación Multicolor de la CONADU, “estamos planteando una alternativa para que el reclamo no termine en paros aislados, sino que tiene que haber asambleas generales de docentes y afiliados, y no afiliados a nuestro sindicato, y tenemos que preparar actos y demostraciones en cada ciudad y preparar una tercera marcha federal”.
Con acuerdo a ello, afirmó que, desde la CONADU, “no vamos a dejar pasar ni el hambre de los jubilados ni la muerte por falta de medicamentos oncológicos ni la miseria salarial que nos condena al hambre, y el 8 de abril en el marco de nuestro congreso vamos a determinar cómo continuamos con las medidas de fuerza, y desde nuestro espacio vamos a proponer una nueva marcha federal y un plan de lucha continuado hasta terminar con el plan de Milei que es destruir la universidad pública”.
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