A pesar de que las primeras medidas económicas del gobierno nacional de turno despertaron expectativas favorables, el sector de la pequeña y mediana empresa comenzó a advertir que las periódicas subas de precios en diferentes productos y servicios ponen en riesgo la actividad de los comerciantes y empresarios. Se advierte que de persistir dicha tendencia podrían cerrar numerosos comercios lo que, según se advierte, conllevaría la pérdida de puestas de trabajo.
En dicho marco, desde la Unión de Empresarios de Jujuy, a través de su titular, Luís Alonso, se expuso la inquietud que reina entre el empresariado local que diariamente debe afrontar subas de precios en la mayoría de los rubros, particularmente los insumos que son necesarios para desarrollar sus actividades.
“Los anuncios del gobierno nacional han impactado fuertemente en la devaluación, por ejemplo, a través de la suba de combustibles que aumentaron de manera importante, así como también los alimentos de primera necesidad, y nosotros sabíamos que podría haber un impacto de este tipo pero no sabíamos que iba a ser a este punto”, comentó el referente de los pequeños y medianos empresarios.
A la vez, alertó que para los empresarios locales resulta dificultoso acceder a diversos insumos, necesarios para su actividad, debido a la ausencia de precios de referencia desde el sector de proveedores. Atento a ello, dijo, “esta situación genera problemáticas para las Pymes jujeñas que no pueden vender porque no tienen insumos para poder producir o para poder vender en sus locales”.
A partir de estas, y otras situaciones, suscitadas tras la primera semana de gestión del gobierno nacional, Alonso reconoció que “la situación es compleja, y tenemos por delante meses complejos a la espera que de esto se estabilice”. Al mismo tiempo reiteró que para el sector Pyme resulta fundamental la “previsibilidad”, y que la ausencia de un contexto económico estable complica las posibilidades de generación de inversiones para el desarrollo de actividades económicas.
Al ampliar conceptos mencionó que la actual crisis económica impacta negativamente en el sector asalariado lo que repercute en la actividad de los pequeños y medianos comercios que, según acotó, “se nutre en un 90 por ciento del sector trabajador, por lo que mientras no haya una estabilización de precios va a ser difícil para el sector pyme”.
Frente a dicho panorama no descartó que, en caso de persistir la escalada inflacionaria, la situación de las empresas se agrave y derive en el cese de actividades. “Hay preocupación porque no solo caerían las ventas sino también caerían Pymes por lo que son momentos en los que se deben mantener las estructuras a la espera de que en algunos meses la situación pueda estabilizarse”, manifestó el referente empresarial.
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