Mientras funcionarios del estado provincial, y particularmente del municipio capitalino, insisten en que la actual crisis de los subsidios a las empresas de transporte público es de responsabilidad del gobierno nacional, la Cámara de Transporte Automotor de Pasajeros de Jujuy advirtió que de no resolverse el financiamiento del BEGU podría disponer la suspensión del beneficio, con lo cual miles de estudiantes no podrían acceder al transporte gratuito. En tal sentido, emitieron un comunicado a través del cual intiman a los gobiernos provincial y municipal a definir alternativas de solución a la problemática.
En la misma jornada en la que tomó estado público la decisión del gobierno municipal de la capital de aumentar, en un 10%, el boleto del transporte urbano, las empresas reunidas en la Cámara de Transporte Automotor de Pasajeros de Jujuy emitieron un comunicado a través del cual dan cuenta de la crisis derivada de la falta de financiamiento del Boleto Estudiantil Gratuito Universal (BEGU).
Mediante dicho comunicado, las empresas exigen a las autoridades municipales y provinciales que aborden y resuelvan la falta de financiamiento al sistema que garantiza la gratuidad del transporte a los estudiantes jujeños. Al mismo tiempo señalaron que de no mediar una resolución se procedería a suspender el beneficio con lo cual los usuarios, particularmente estudiantes de los diferentes niveles educativos, deberán abonar la totalidad de la tarifa que, en breve, y a partir de una decisión del municipio capitalino, pasará a costar 825 pesos.
Al fundamentar la decisión empresarial se sostiene que la actual situación del financiamiento del BEGU es “insostenible”. A partir de ello se afirma que, desde la Cámara, “nos vemos en la obligación de informar que, de no mediar una solución definitiva, las empresas prestatarias del sistema urbano de pasajeros de nuestra ciudad dejarán de aceptar como válidas las tarjetas SUBE con el beneficio del BEGU”.
Se reseña además que desde el 2023 el sector empresarial alertó a las autoridades provinciales y municipales sobre los inconvenientes derivados de las limitaciones del financiamiento para sostener el boleto estudiantil gratuito. A pesar de dichas advertencias, los funcionarios omitieron ámbitos de diálogo para definir posibles alternativas de solución, y solo se abocaron a cuestionar públicamente las medidas adoptadas por el gobierno nacional que, como es sabido, avanzó con su política de eliminación de los subsidios en diferentes servicios.
Al mismo tiempo, el empresariado sostiene que, “lamentamos profundamente la situación planteada, pero esta medida es impostergable para garantizar la supervivencia de las empresas y la continuidad del servicio. Esperamos una respuesta favorable y expedita por parte de las autoridades competentes para evitar afectar a miles de usuarios que utilizan este beneficio diariamente”.
Luego de que el pronunciamiento conjunto de la Cámara de transporte tomara estado público comenzaron a replicarse las críticas hacia las autoridades, particularmente por la ausencia de información concreta sobre los recursos que efectivamente destina provincia y el municipio capitalino a las empresas. Los cuestionamientos de los pobladores, especialmente padres de estudiantes, se fundan en el hecho de que en breve se reanudará el ciclo lectivo lo que acentúa la incertidumbre en torno al futuro del BEGU.
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